Este análisis es la versión escrita de este vídeo aquí abajo. Podéis echar un ojo en el formato que más os guste.
Terror en la hacienda Baker
Resident Evil 7 es un buen juego, pero no es para todo el mundo. Y eso es bueno, creedme. Si no os gusta pasar miedo o lleváis marcapasos, este juego no es para vosotros. Pero si os gusta, este es uno de los mejores del género.
Me he vuelto a dejar toda la munición de magnum sin usar
Resident Evil 7 cambia la tercera persona, o los ángulos de cámara fijos si sois de la vieja escuela, por la primera persona; y, madre mía, es una locura. El terror se vive mucho mejor (o peor, como lo queráis ver) en primera persona. No soy precisamente un fan de los juegos de terror aunque jugara a los Resident Evil clásicos hace muchos años; alguno juego, pero no es lo que normalmente consumo. Este juego ha sido, para mí, un bautismo de fuego en ese sentido. No he jugado Amnesia o Outlast, y aquí Capcom ha tomado nota de ellos, estoy seguro.
En cualquier caso la esencia de Resident Evil sigue intacta: nunca vas a estar cien por cien desprotegido contra los enemigos, incluso los que son invencibles en algunas secciones se pueden aturdir o ignorar. La primera persona funciona más o menos como la esperaríais de cualquier shooter: botón para apuntar, botón para disparar, botón para correr. Apuntar anula la dispersión de las armas y no podemos disparar y correr a la vez. La única mecánica única es la guardia, tendremos un botón para reducir en gran medida el daño de los enemigos si lo pulsamos a tiempo. En ocasiones huir de los golpes es difícil así que es una mecánica que tiene sentido en el contexto del juego. Si tenéis buena puntería los enfrentamientos generalmente no tendrán demasiada complicación en mecánicas, lo más importante es, por supuesto, la gestión de recursos. Explorar, conseguir munición y salud, y no malgastarla. No es un juego de acción, pero mentiría si os dijera que no os tiene en vilo todo el rato con la tensión y el diseño del sonido.
Hay dos clases de enemigos: los “mohosos”, que son una suerte de monstruos zombificados, y los infectados, gente infectada por el mismo hongo pero que, en lugar de mutar, pierden la cabeza y consiguen fuerza sobrehumana y habilidades especiales. Generalmente de los infectados tenemos que huir hasta llegar a sus respectivas arenas cuando el guión lo requiera; y, en cuanto a los “mohosos”, los trataremos como a los típicos zombis o monstruos de los Resident Evil antiguos – vamos, que los coseremos a tiros. Solo los infectados son capaces de abrir y cerrar puertas, así que las puertas son una mecánica en sí, tened cuidado y cerradlas siempre.
Esta jugabilidad es, a mi parecer, muy efectiva, y el juego utiliza muy bien la primera persona para esconder sus objetos y asustarnos con sus enemigos. Si soportáis el miedo, este es vuestro juego.
La Matanza de Luisiana
Aunque a primera vista parezca que Resident Evil 7 es un reboot de la saga, es decir, un reseteo completo, esto está un tanto lejos de la realidad; sí, la perspectiva es diferente, y jugamos con un personaje totalmente nuevo, pero, sin hablar de spoilers, la trama enlaza con el resto de la saga hacia el final.
Tomaremos el rol de Ethan Winters, un marido que busca a su esposa Mia, perdida hace tres años. Sin noticias de ella después de tanto tiempo, recibe un email suyo en el que le dice donde se encuentra pero le pide no acercarse de manera muy críptica. Ethan, en lugar de llamar a la policía, decide ir solo a rescatarla. ¿Por qué? Porque si no, no tendríamos guión, por supuesto. Sí, vale, este es el aspecto más débil de la narrativa, pero en fin, es un tópico de película de terror que debemos creernos para poder disfrutar del resto, que es bastante bueno, he de decir.
Durante nuestra estancia en la hacienda Baker deberemos luchar contra su familia, ahora infectada. Básicamente debemos ir de sección en sección de la casa primero huyendo, y luego luchando en su respectiva arena contra cada miembro. Por el camino descubriremos el origen de la infección y cómo se relaciona todo con el universo de Resident Evil, muy poco a poco; el juego hace un buen trabajo en mantenernos en continuo suspense con lo que está pasando.
Ethan no es un personaje silencioso; opina sobre lo que ocurre y no se acobarda fácilmente. Por algo ha ido él solito a rescatar a su mujer. Es simplemente un tipo normal con un buen par, dicho mal y pronto. Quizá como mecanismo de supervivencia siempre reacciona de la manera más directa y vulgar contra toda la clase de locuras que le esperan en la hacienda; no importa lo psicópata que sea su próximo enemigo, Ethan no dudará en enfadarse e ir a por él. No es un héroe de acción, pero es alguien que hará lo que sea por su familia; concepto contrastado por la enfermiza interpretación de este que tiene la familia Baker. Siendo realistas, Ethan no tiene un arco argumental demasiado definido, no cambia demasiado durante el juego; la narrativa se centra en la familia Baker, Mia, y cómo ha acabado todo en esta locura. Pero me ha gustado que Ethan no sea un héroe silencioso, personalmente nunca he sido muy fan de estos, y creo que actúa de una manera muy natural ante la locura que está viviendo.
Quitando el hecho absurdo de que Ethan no llamara a la policía al principio, Resident Evil 7 tiene una historia muy buena con muchos matices, que te hace cuestionar el concepto de familia y de las consecuencias de acoger a un desconocido en la tuya propia. Vamos, como Fast & Furious, pero en plan bueno.
Dirección artística impecable con buen rendimiento
Resident Evil 7 luce espectacular; como los espacios son generalmente bastante reducidos, el nivel de detalle es MUY elevado. Especialmente las manos de Ethan, con una anatomía que roza el fotorrealismo. Se puede llegar a ver las pinceladas en los cuadros que hay por la casa; todo está diseñado para que se pueda ver de cerca en esta nueva perspectiva para la saga. Los personajes tienen esa estética de psicópata de La Matanza de Tejas que está muy lograda y que es difícil de replicar sin que parezca una caricatura. Los entornos son muy variados, con mucha historia contada a través de ellos. Cada habitación de la casa tiene un propósito, nada parece fuera de lugar.
La música es escalofriante, con melodías que recuerdan a clásicos como El Resplandor. Capcom siempre ha tenido buena mano con la música, y este no es excepción. Cada una de las melodías está donde le corresponde, y acrecienta el efecto del suspense y la tensión. Un diez, vamos. Ah, y la canción con vocales del principio, “Go Tell Aunt Rhody”, un temazo también.
Se dice que en los juegos de terror el sonido es lo más importante, y aunque quizá esto esté un poco exagerado, sin duda es algo crucial. Resident Evil 7 cumple con creces, con ruidos que harán que os deis la vuelta para mirar cada dos por tres, alimentando vuestra paranoia. Recomiendo jugar con unos cascos buenos, la experiencia mejora muchísimo.
En cuanto al rendimiento el juego cumple en su mayoría, con pérdidas de fps, eso sí, entre habitaciones. Pero bueno, algo menor, en general no hay ninguna queja mayor. Y, aparte de eso, os recomiendo que echéis un ojo aquí al análisis de sus DLC cuando lo publique.
Espectacular